APATIA ESPIRITUAL
Desgraciadamente muchos cristianos han caído en una apatía espiritual muy grande. Es como si consideraran que ya son salvos, luego entonces esta bien conformarse con ser salvos. Muchos se están haciendo insensibles al dolor humano, a la necesidad de las personas dentro y fuera de la iglesia. Se conforman con ser salvos ellos, con que Dios los bendiga y sane a ellos, con que Dios les provea a ellos y se olvidan que quizá a su lado hay alguien que no sabe orar, que desconoce la palabra de Dios y el poder de Dios y que si esta a su lado es porque Dios lo llevo ahí con un propósito. Movimientos mundiales hablan de estrategias para atraer a los “apartados” de vuelta a las iglesias. Mi Biblia me enseña que Jesús nos mando a donde la NECESIDAD esta, y en ningún momento nos dijo que los necesitados vendrían a donde la iglesia esta. Porque es muy cómodo ser cristianos de domingo.
Es muy satisfactorio sentarse cada domingo en un lugar de la iglesia, y escuchar una platica, y luego regresar a casa y sentir que todo está bien. Que porque fuimos a la iglesia el domingo, o participamos de un grupo de células, ya hicimos nuestra parte, pero mi Biblia me enseña que esto no es así. Conozco que los necesitados de una Palabra, una oración, no están en la iglesia, sino que están allá afuera, en ese mundo traqueteado en que nos ha tocado vivir. Son los vecinos, son los otros empleados en el lugar de trabajo. Son los otros estudiantes en las escuelas, son los amigos de mis hijos. Son personas por las cuales mi Señor Jesús dio la vida también. Son gente que están siendo llevados a donde no quieren ir.